Tu
palabra es una lámpara a mis pies; es
una luz en mi sendero. Hice un juramento, y lo he confirmado: que
acataré tus rectos juicios. Señor, es mucho lo que he sufrido; dame vida
conforme a tu palabra. Señor,
acepta la ofrenda que brota de mis labios; enséñame tus juicios. Mi vida pende de un hilo, pero no me
olvido de tu ley. Los impíos me han tendido una trampa, pero no me aparto de tus
preceptos. Tus estatutos son mi herencia permanente; son el regocijo de mi
corazón. Inclino mi corazón a cumplir tus decretos para siempre y hasta el fin.
Salmos
119:105-112 (NVI)
Sin
más recursos. Ptr Víctor López.
¿Te has encontrado perdido
en algún momento de su vida en algún lugar hostil o desértico? Imagínate en
medio del bosque a media noche, con tu celular en mano, pero sin señal. Solo te
queda usar la aplicación de la brújula y la lámpara. Tienes que ser cuidadoso
porque solo te queda la mitad de batería en el celular.
La luz que emite el celular
solo puede mostrarte un área pequeña del terreno por el que andas. Para caminar
de manera segura en el bosque debes de poner atención a lo que la luz te
permite ver. Pero eso no es todo, debes ser sabio y cauteloso en dirigirte
correctamente a la salida del bosque porque la energía del celular no durara
mucho tiempo. Mucho cuidado en caminar en círculos. Sería un grave error.
Son pocos los recursos que tienes,
pero sí los aprovechas sabiamente saldrás de ahí.
En la vida también caminamos
por bosques oscuros de maldad. Sin embargo, la Biblia es nuestra lámpara en el
camino que está enfrente de nosotros y así no caeremos mientras avanzamos. La
luz revela los obstáculos y peligros en el bosque, la Biblia revela las raíces de
maldad, falsos valores o filosofías mal intencionadas que nos rodean en este
mundo.
Es nuestra caminar cristiano
los recursos son pocos, pero muy confiables. La Palabra de Dios y El Poder del
Espíritu Santo son la clave en esto.
Pero no pierdas de vista la
responsabilidad que envuelve todo esto. Ya sea una lámpara de aceite o un
celular con luz, es responsabilidad de uno el tener la lámpara en buena
condición para su correcto. El mandamiento es que la lámpara se tiene que mantener
encendida con energía y eso es el poder del Espíritu Santo que le da sentido a
lo que leemos en la Biblia. Es la obediencia a los mandamientos de Dios por
parte de nosotros lo que da luz a nuestra vida.
Estudiar la Biblia y
depender del poder del Espíritu Santo es nuestra tarea. Esto nos ayudará a ver
el camino claramente y nos mostrará lo suficiente del camino como para avanzar.
Quizás no sea mucho, pero la luz está ahí en medio de un lugar oscuro, para que
tú des un paso a la vez.